Nuestros amigos Jesús y Chelo, a los que les encanta el norte de España y hacen muchas escapadas sobre todo a Asturias y Cantabria, nos regalaron, después de sus últimas vacaciones un queso de cabrales.
Personalmente éste queso me parece impresionante, hace años no me gustaba mucho, pero poco a poco fui descubriendo su sabor tan intenso, tan especial y una cremosidad que me encanta. Además de tener muchísimas posibilidades en la cocina (en salsas, cremas, ensaladas....incluso en el mundo dulce: Jesús nos contó que estuvieron en una charla-degustación de cabrales y probaron bombones de cabrales con chocolate blanco que quitaban el sentido).
Pues aproveché que había comprado tournedó y que tenía el cabrales en casa para hacer una salsa de cabrales. Así que aquí os dejo el resultado, para mi muy muy bueno, pero tienes que ser amante de los quesos y sabores fuertecitos porque la salsa es potente.
Personalmente éste queso me parece impresionante, hace años no me gustaba mucho, pero poco a poco fui descubriendo su sabor tan intenso, tan especial y una cremosidad que me encanta. Además de tener muchísimas posibilidades en la cocina (en salsas, cremas, ensaladas....incluso en el mundo dulce: Jesús nos contó que estuvieron en una charla-degustación de cabrales y probaron bombones de cabrales con chocolate blanco que quitaban el sentido).
Pues aproveché que había comprado tournedó y que tenía el cabrales en casa para hacer una salsa de cabrales. Así que aquí os dejo el resultado, para mi muy muy bueno, pero tienes que ser amante de los quesos y sabores fuertecitos porque la salsa es potente.
INGREDIENTES:
3 filetes de tournedó de ternera.
1/2 cebolla.
2 espárragos trigueros.
Aceite de oliva.
Sal.
1 brick de 200 ml de nata para cocinar.
30 gr de queso de Cabrales.
50 ml de vino blanco seco.
PREPARACIÓN:
Pelamos y cortamos la cebolla en juliana. Ponemos a calentar 3 cucharadas soperas de aceite de oliva. Cuando está muy caliente añadimos la cebolla. La hacemos a fuego fuertecito. Tenemos que remover la cebolla casi continuamente, ya que no queremos que se queme pero tampoco que se poche y quede demasiado blandita. Digamos que la queremos salteada.
Mientras tanto ponemos una plancha con unas gotitas de aceite a calentar a fuego fuerte.
Hacemos el tournedó con un poquito de sal y damos la vuelta. No debe hacerse demasiado, con un par de min por cada lado sobraría.
Retitramos la carne a un plato y en esa misma sartén añadimos la nata, el vino blanco y el cabrales. Removemos un poco, dejamos que el queso se deshaga bien y salseamos la carne.
A la salsa no hace falta echarle sal.
Servimos la carne con la salsa y la cebolla a un lado.
Por último podemos saltear un par de trigueros y acompañar la carne.
¿Se puede modificar por otro tipo de queso?a mi chico el cabrales como que no..¿qué quesos serían recomendables?
ResponderEliminarClaro que sí, parecidos al Cabrales están el Roquefort, el queso Azul, el Gorgonzola...pero si no le gusta el Cabrales es posible que éstos tampoco.
ResponderEliminarSi le gustan más suaves puedes probar por ejemplo con un poquito de queso de cabra y el resto de nata, por ejemplo un pard e rodajitas de queso de cabra President y el resto de nata, ya verás como se suavida el sabor.
También que la salsa esté fuerte depende de la cantidad de queso que le pongamos.
Ésta salsa se puede hacer igual si sustituyes el queso por pimienta negra o verde molida, pero en vez de tournedó al Cabrales lo tendrías a la pimienta, lo digo por si el queso no le gusta nada de nada.